31 de enero de 2008

Un Mejor Diseño Puede Lograr Circuitos Integrados Más Pequeños y Rápidos




Foto: UCLALos circuitos integrados son el "cerebro" de los ordenadores,

los teléfonos móviles,
los reproductores de DVD, los iPhones, los PDAs, los sistemas de navegación de los automóviles y muchos otros dispositivos electrónicos. Un equipo de científicos ha demostrado ahora la viabilidad de hacer mejoras sustanciales en estos circuitos integrados, logradas no mediante costosos refinamientos en los procesos de fabricación sino perfeccionando el software del diseño asistido por ordenador, basándolo en mejores algoritmos matemáticos.

Menéame

Los investigadores, de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), pueden obtener circuitos diseñados con un 30 por ciento menos de longitud de cableado usando una versión mejorada de la optimización que ya demostraron hace tres años, basándose en circuitos representativos de los más usados. Los investigadores creen que cuando estos métodos puedan aplicarse a los circuitos actuales que produce la industria de la electrónica, generarán beneficios similares. Para la industria, incluso un 5 por ciento ya resulta muy importante.

"Estamos demostrando que existe otra forma de lograr perfeccionamientos sustanciales, con un mejor diseño y una arquitectura más eficiente", subraya Jason Cong, profesor de la UCLA y catedrático de ciencias de la computación, quien ha colaborado durante casi una década con Tony Chan, profesor de matemáticas de la UCLA.

La forma tradicional de obtención de circuitos integrados (también conocidos como chips de silicio) que resulten más pequeños y rápidos, es construir transistores cada vez más pequeños y cables cada vez más delgados. Aunque la industria de la computación ha fabricado dispositivos progresivamente más pequeños y mejorados, Cong, Chan y sus colegas están perfeccionando el diseño del propio chip.

Una meta de la colaboración es el desarrollo de chips de silicio que sean más rápidos y baratos, y que consuman menos energía, que los actuales.

Ellos piensan que optimizar el diseño de los chips es una dirección muy prometedora.

Chan y Eric Radke diseñan los algoritmos para que el software de diseño mejore la colocación de algunos elementos. Los científicos esperan que la investigación produzca un software mejorado para el diseño perfeccionado de chips. El laboratorio de Cong ha encontrado evidencias claras de que los programas informáticos existentes para el diseño de circuitos integrados están muy lejos de ser óptimos.

Chan y Radke también están trabajando para minimizar la cantidad de tiempo que le toma a una señal pasar por un procesador.

Información adicional en:

* UCLA

Espumas Con Memoria Magnética de Forma




Foto: P. Müllner, M. Chmielus and S. Donovan, Boise State University, and D. Dunand and Y. Boonyongmaneerat, Northwestern University


En el mundo de los materiales comerciales, los más ligeros y baratos acostumbran a ser los mejores, sobre todo cuando esos atributos van acompañados de una resistencia superior y propiedades especiales, como la capacidad del material para recordar su forma original después de ser deformado por una fuerza física o magnética.
Menéame

Una nueva clase de materiales conocidos como "espumas magnéticas" con memoria de la forma, ha sido desarrollada por dos equipos de investigación encabezados por Peter Müllner, de la Universidad Estatal de Boise (Boise, en Idaho) y David Dunand, de la Universidad del Noroeste.

La espuma está formada por una aleación de níquel-manganeso-galio cuya estructura se parece a la de un pedazo de queso gruyere, con pequeños orificios entre delgados "puntales" curvados de material. Los puntales tienen una estructura semejante al bambú, y pueden alargarse hasta un 10 por ciento cuando se les aplica un campo magnético.

Por regla general, el grado en que se deforma un material depende de sus características y de la carga física aplicada. En este caso, la fuerza proviene de un campo magnético en vez de una carga física. Las fuerzas de origen magnético pueden ejercerse de modos que las hacen ventajosas para muchas aplicaciones. El material retiene su nueva forma cuando se suprime el campo, pero la estructura atómica sensible regresa a su forma original si el campo magnético se gira 90 grados, un fenómeno denominado "memoria magnética de la forma".

Esta espuma es la primera en exhibir tal memoria.

Fabricar monocristales grandes del material es demasiado lento y caro para resultar comercialmente viable, por lo que los investigadores fabrican aleaciones policristalinas que contienen muchos cristales pequeños o granos. Los materiales policristalinos tradicionales no son porosos y casi no presentan capacidad para deformarse debido a las restricciones mecánicas de los límites entre cada grano. Por el contrario, un monocristal grande exhibe una gran capacidad de deformación al no existir límites interiores. Introduciendo espacios vacíos en la aleación policristalina, los investigadores han fabricado un material poroso con menos restricciones mecánicas interiores y con una capacidad de deformación razonablemente alta cuando se le aplica carga.

La naturaleza del material amplifica el efecto del cambio de la forma, haciéndolo un buen candidato para fabricar diminutos dispositivos de control de movimiento, o bombas biomédicas sin partes móviles, entre otras posibles aplicaciones. También presenta un gran potencial para usos que requieren una capacidad de deformación grande y peso ligero, como las aplicaciones aeroespaciales y automovilísticas.

Información adicional en:

* NSF

25 de enero de 2008

La Paradoja de Fermi, ¿Dónde Están las Civilizaciones Extraterrestres?



Cincuenta años después de que el
físico italiano Enrico Fermi planteara su famosa Paradoja, la Humanidad
sigue preguntándose: ¿dónde están ellos?, ¿por qué no tenemos pruebas
irrefutables de la visita o existencia de civilizaciones
extraterrestres? Quien desee una respuesta a esta incógnita, se
encontrará con una sorpresa: existen decenas de ellas entre las que
elegir.



Stephen Webb, un físico que trabaja en la británica Open University,
lleva años investigando y reuniendo las diversas “soluciones” aplicables
a la Paradoja de Fermi. En su reciente libro, “Where is Everybody?”,
llega a una desalentadora conclusión: el problema sigue siendo tan
intangible, tan huidizo debido a nuestros pobres conocimientos, que aún
somos incapaces de determinar cuál de ellas es la verdadera -si es que
realmente alguna lo es-.

Pero no nos desanimemos. Quizá sea usted una mente inquieta capaz de
proporcionar una solución original y, por qué no, definitiva a la
Paradoja. Sin embargo, si prefiere tomárselo con calma y averiguar
primero lo que otros han dicho antes al respecto, siga leyendo y
descubrirá algunas de las conclusiones más interesantes a las que han
llegado expertos y estudiosos del tema.



YA ESTAN AQUI

Stephen Webb, en su profundo trabajo de recopilación, ha organizado las
posibles soluciones a la Paradoja de Fermi en tres grandes grupos de
optimismo decreciente. El primero de ellos es el que contempla la más
sencilla resolución: los extraterrestres ya están aquí o nos han
visitado alguna vez.

La primera contestación que recibió Fermi estuvo precisamente en esta
línea, y procedía de su buen amigo Leo Szilard, con quien compartía mesa
en Los Alamos. Aunque en honor a la verdad, no parece que hablara
demasiado en serio: el científico dijo, medio en broma, que los
extraterrestres ya tenían un nombre: húngaros. Szilard, que había nacido
en Budapest, compartía ciudad natal con sus colegas Eugene Wigner,
Edward Teller, John von Neumann o Theodore von Kármán, todos ellos
auténticos genios en sus respectivos campos de la Ciencia. Tan
brillantes eran (Neumann fue considerado el hombre más listo del mundo)
que sus colegas los llamaban a menudo “los marcianos”.

La siguiente solución aportada resultaba bastante más obvia. En el
apogeo de la histeria provocada por la aparición de platillos volantes,
parecía claro que éstos procedían del espacio exterior, que nos estaban
visitando con frecuencia y que incluso se atrevían a entrometerse en
nuestros asuntos. Si los famosos OVNIs están además tripulados por
extraterrestres, la Paradoja de Fermi queda resulta de inmediato.

Suponiendo que no nos convenza demasiado el origen de los platillos
volantes, aún no debemos renunciar a la existencia de civilizaciones
extraterrestres (CETs). Quizá nos visitaron en un lejano pasado, y
dejaron pistas sobre su presencia en nuestro planeta. Autores de dudosa
fiabilidad, como Erich von Däniken, han escrito mucho sobre ello. En
todo caso, dichas señales podrían encontrarse en nuestro planeta, la
Luna, Marte o cualquier otro planeta del Sistema Solar.

En 1996, la NASA anunció la posible (y polémica) existencia de fósiles
de vida marciana en un meteorito caído y recogido en la Antártida. Si
existió vida en la historia remota del Planeta Rojo, y ésta consiguió
llegar hasta aquí hace mucho tiempo, para después evolucionar, podríamos
llegar a una nueva conclusión: los extraterrestres (marcianos) existen,
pero somos nosotros. Algunos científicos, de hecho, insisten en que la
vida terrestre procede del espacio (teoría de la panspermia). Si la
“plantación” fue, además, deliberada, tendríamos otra prueba de que ahí
afuera hay alguien que ya nos ha visitado, al menos una vez.

También resulta curiosa la propuesta de John Ball, que nos habla de la
Tierra como un “zoológico” preparado por los extraterrestres.
Civilizaciones muy avanzadas aparecerían y desaparecerían en la Galaxia,
destruidas por sus enemigos o por sí mismas. Alguna de ellas podría
haber deseado establecer una reserva en este planeta azul, alejada del
“ruido galáctico”, donde la vida pudiera desarrollarse sin verse
afectada por los dramáticos acontecimientos del exterior. Así, nuestro
mundo sería sólo un ente para ser observado, ajeno a todo lo demás. Una
variación del escenario del zoológico, ideada por Martyn Fogg, propone
que la Tierra podría estar bajo la esfera de influencia de alguna
civilización tan avanzada que, no necesitando de sus recursos, no desea
que su esencia sea contaminada por influencias exteriores.

En una línea similar, pero muy “matrixiana”, Stephen Baxter sugiere que
la Tierra y sus inquilinos viven en una especie de simulación de
realidad virtual, que nos proporciona una impresión artificial del
Universo semejante a la que tenemos cuando entramos en un planetario.
Nos inculcarían así la ilusión de que estamos solos en el Universo, y
nos alejarían de cualquier influencia que cambiara nuestra línea
evolutiva natural.

La última solución de este grupo de propuestas nos acerca a la teología.
Si creemos en su existencia y otorgamos un carácter omnipotente a Dios,
es posible que, ante nuestros ojos, las civilizaciones extraterrestres
más avanzadas no se distingan demasiado de este ser supremo. En este
sentido, Edward Harrison propone que nuestro Universo, con sus leyes
físicas y constantes particulares, habría sido creado artificialmente en
un laboratorio, dentro de otro universo mayor.





NADA EN EL CONTESTADOR (AUN)

El segundo grupo de soluciones a la Paradoja de Fermi sigue otorgando
visos de realidad a la existencia de CETs. Pero si bien deben estar ahí
fuera, todavía no se han comunicado con nosotros.

¿Cómo justificar esta falta de contacto? La forma más directa es aquella
que afirma de forma categórica que las estrellas están demasiado lejos;
siendo esto rigurosamente cierto, el viaje interestelar podría no ser
posible, lo que evitaría que los extraterrestres vinieran a visitarnos,
aunque quisieran hacerlo.

Alternativamente, y esperando que, armados con una tecnología alejada de
cualquier cosa imaginada, fueran capaces de recorrer tan vastas
distancias, nuestros amigos podrían estar ya en camino: simplemente, no
habrían tenido tiempo de llegar hasta nosotros. Tengamos en cuenta que,
a la velocidad de la luz, tardaríamos más de 4 años en llegar a la
estrella más próxima a nosotros, o millones de años si nos dirigiéramos
hacia otras galaxias. Quizá nuestros hermanos espaciales viajan en
naves-mundo preparadas para colonizar a medida que avanzan, vehículos
que han asistido al nacimiento y muerte de innumerables generaciones de
individuos.

Pero incluso si la colonización de la Galaxia estuviera tan avanzada, la
Tierra podría haber quedado al margen. Geoffrey Landis opina que algunas
civilizaciones podrían encontrar más atractivas unas zonas que otras, en
función de su propia naturaleza. Si no pudimos ofrecer algo de interés
para ellos, tal vez hayamos sido ignorados. Otra posibilidad es que los
propios extraterrestres consideren viajar personalmente a otros mundos
un acto de desgaste biológico injustificable. Siendo muy avanzados,
puede que no nos visiten ellos, sino sus máquinas, en especial aquellas
capaces de auto-replicarse y extenderse exponencialmente a través del
espacio (como las sondas de Bracewll-von Neumann), asimilando la materia
prima que encuentren en el camino.

Tampoco hay que desdeñar las peculiaridades que distinguirían a las
civilizaciones extraterrestres. Algunas de ellas podrían haber
encontrado sus fuentes de energía en ámbitos distintos al espacio
normal, no teniendo ninguna necesidad de desplazarse a otros mundos. O
acaso hayan decidido quedarse en casa y comunicarse sólo vía radio o un
sistema equivalente.

¿Por qué querrían quedarse en su mundo sin explorar? Si antes hablamos
de que podríamos estar viviendo en una realidad virtual creada por
ellos, lo contrario podría ser asimismo cierto. Su sofisticación
tecnológica les habría hecho edificar una realidad alternativa mucho
mejor y más placentera que la real.

Algunos científicos, en cambio, creen que es culpa nuestra no haber
detectado CETs. Estos seres podrían haber estado intentando comunicarse
con nosotros desde hace tiempo, quizá desde siempre, sin que nosotros
hayamos obtenido todavía las herramientas precisas para poder oírles.
Las comunicaciones podrían hacerse no sólo a través de ondas de radio,
algo que ya dominamos, sino también mediante ondas gravitatorias,
partículas exóticas, o sistemas que aún no hemos descubierto. ¿Y si
están utilizando un medio de comunicación que sabemos cómo utilizar,
pero del cual carecemos la frecuencia exacta por la que transmiten? Las
actuales búsquedas SETI se desarrollan por el momento casi “a ciegas”.

Siendo más optimistas, imaginemos poseer ya las herramientas y la
frecuencia de recepción. ¿Bastaría con ello? No. Deberíamos saber hacia
dónde mirar y orientar bien nuestros instrumentos. Hay millones de
estrellas ahí fuera y no estamos muy seguros de cuáles tienen mayores
probabilidades de poseer planetas habitados. Actuamos basándonos en
suposiciones más o menos científicas, esperando, por qué no, el apoyo de
la suerte. Sin ella, buscar a tan escurridiza aguja en el inmenso pajar
cósmico podría suponer millones de años de trabajo sin recompensa
alguna.

Por fortuna, no faltan quienes creen que la señal que delatará la
existencia de las CETs ha sido ya capturada por nuestros
radiotelescopios. Nuestro problema sería que somos incapaces de
identificar esa señal, separándola del ruido de fondo. No en vano el
análisis de las señales, en investigación SETI, es tanto o más
importante que su obtención. Otros prefieren pedir paciencia: a pesar de
que hemos observado el cielo con detenimiento, lo hemos hecho durante
relativamente poco tiempo. Peor aún, quizá prestamos atención a las
señales de una determinada estrella cuando nuestros amigos alienígenas
estaban “cambiándole los fusibles” a su antena de transmisión y por
tanto ésta se encontraba inactiva. El éxito dependerá, probablemente, de
nuestra constancia.

El auge alcanzado por la investigación SETI en nuestros días plantea
otro curioso interrogante. ¿Y si todos escuchan y nadie transmite? Si
descontamos nuestras señales de radio y televisión, nosotros lo hicimos
brevemente hace tiempo, pero nuestro mensaje puede haber pasado
totalmente desapercibido o requerir millones de años para llegar a un
indeterminado punto de destino.

Existe otra desalentadora posibilidad: las CETs podrían NO querer
comunicarse con otros mundos. La psicología extraterrestre se nos
escapa, y no podemos esperar que cumplan con nuestro código de conducta.
Quizá tienen miedo de ser descubiertos y colonizados por otras razas más
a la vanguardia técnicamente, o puede que ya sean tan avanzados que no
encuentren interés alguno en entablar relaciones con seres claramente
inferiores.

Cambiando de registro, y desde un punto de vista científico, es posible
que algunas civilizaciones empleen unas matemáticas demasiado distintas
a las nuestras. Su concepto de la Ciencia y su descripción de la
naturaleza serían tan diferentes que no sabemos si seríamos capaces de
entendernos. Podrían estar transmitiéndonos señales en las que no
sabríamos reconocer la artificialidad que los delatara. Esperemos que
existan civilizaciones más semejantes a nosotros, o al menos, deseosas
de ser comprendidas al más bajo nivel posible.

Otros autores denuncian nuestra relativa falta de conocimientos. Somos
una especie joven, cuya ciencia apenas lleva acelerando progresivamente
unos cientos de años. Todavía no hemos sido capaces de desarrollar una
teoría del todo, que englobe gravitación, electromagnetismo, sistemas
cuánticos... No podemos declarar saberlo todo sobre el Universo, ni
sobre los fenómenos que en él se desarrollan. Podríamos especular aquí
sobre universos paralelos, otras dimensiones..., lugares en los que no
sabemos buscar y que podrían estar habitados por seres reales pero
inalcanzables desde nuestro punto de vista.

Contemplando nuestros propios problemas como especie inteligente, tal
vez debamos plantearnos si es posible convertirse en civilización
avanzada sin autodestruirse en el proceso. Existirían muchas CETs tan
avanzadas como la nuestra, pero también tan imposibilitadas como
nosotros de viajar o comunicarse de forma apropiada. Ninguna de ellas
alcanzaría ese umbral mágico, porque todas acabarían desapareciendo,
destruidas por su propio potencial o sus defectos. Como ejemplo,
consideremos el crecimiento exponencial en la capacidad de nuestras
máquinas y ordenadores. Vernor Vinge considera que hacia 2030 nuestras
computadoras habrán alcanzado un estado de inteligencia sobrehumana. En
poco tiempo podrían tomar el control y provocar la desaparición del
Hombre. Teniendo en cuenta que la computación es un requisito para mirar
hacia las estrellas con ambición, este desastre podría estar ocurriendo
ahora mismo en todo el Universo. Pero aún deberíamos preguntarnos:
¿dónde están esas súper-inteligencias mecánicas?

Otras civilizaciones jamás desarrollarán ordenadores que las destruyan.
Su entorno (subterráneo, por ejemplo) podría no haber propiciado el
desarrollo de las matemáticas o la astronomía. No sabrán ni se
preguntarán nunca si existen otros seres vivos en el espacio.

Para cerrar este grupo de posibles respuestas a la Paradoja de Fermi,
conviene mencionar la propuesta de Michael Hart, que concede que existen
muchas CETs, pero ninguna en nuestro horizonte visible. Dada la
velocidad finita de la luz, si el Universo, por su parte, fuera
infinito, sólo podríamos tener acceso a una parte de él. Aunque
estuviera lleno de vida, lo que estuviera demasiado lejos estaría
siempre fuera de nuestro alcance.


22 de enero de 2008

21 de enero de 2008

Nueva Hipótesis Sobre el Origen de la Vida


Según la investigadora Helen Hansma, de la Universidad de California en Santa Bárbara, la vida pudo haber comenzado en espacios protegidos dentro de estratos de un mineral, la mica, en océanos primitivos.
MenéameSu hipótesis propone que los estrechos espacios entre delgadas capas de mica pudieron proporcionar las condiciones adecuadas para la aparición de las primeras biomoléculas, permitiendo el surgimiento de células sin membranas.
La separación entre los estratos también habría provisto el aislamiento necesario para la evolución darviniana."Algunos científicos creen que las primeras biomoléculas fueron proteínas simples, y otros, que fue el ácido ribonucleico (ARN)", explica Hansma. "Tanto las proteínas como el ARN pudieron haberse formado entre los estratos de mica".El ARN desempeña un papel importante en traducir el código genético, y está compuesto de bases nitrogenadas, azúcar, y fosfatos. El ARN y muchas proteínas y lípidos en nuestras células tienen cargas negativas como la mica. Los grupos fosfato del ARN están distanciados medio nanómetro, al igual que las cargas negativas en la mica.

Los estratos de mica están unidos por potasio, cuya concentración es muy similar a la existente en nuestras células. Asimismo, el agua de mar, que bañó la mica, es rica en sodio, como nuestra sangre.El calentamiento y el enfriamiento del ciclo día-noche habrían causado que las láminas de mica se movieran de arriba abajo, y las olas habrían proporcionado igualmente una fuente de energía mecánica. Ambas formas de movimiento habrían causado la formación y ruptura de los enlaces químicos necesarios para permitir una bioquímica primitiva.Así, los estratos de mica pudieron haber proporcionado el soporte, la protección, y el suministro de energía para el desarrollo de la vida precelular, permitiendo ello la posterior formación de la maquinaria de los organismos vivos de hoy.

Información adicional en:
UCSB

Investigación Ergonómica Para Prevenir Lesiones al Trabajar Con Ordenadores


Una silla ondulante, un ratón que vibra, un monitor suspendido sobre un escritorio en un brazo móvil. Estos son algunos de los tipos de novedosos productos ergonómicos que Alan Hedge, una autoridad internacional en ergonomía de oficina y profesor de diseño y análisis ambiental en la Universidad de Cornell, estudia para determinar si pueden prevenir los daños provocados por los movimientos repetitivos en las personas que usan ordenadores de manera habitual.


MenéameMuchos problemas de salud son lesiones derivadas de movimientos repetitivos asociados con el trabajo de oficina. Las lesiones en la espalda representan un tercio de todas las lesiones en los puestos de trabajo. Una década atrás, la mayoría de éstas estaban asociadas con trabajos pesados. Hoy en día, en ciertos países son causadas mayormente por estar las personas sentadas durante largos períodos de tiempo, a menudo frente a un ordenador.El uso de los ordenadores desde edades más tempranas convierte a la tasa actual de problemas de salud en el canario en la mina de carbón. Hedge encontró que, típicamente, hay de 10 a 15 años de latencia antes de que las lesiones comiencen a desarrollarse.


A comienzos de la década de 1990, mostró que la edad promedio de los trabajadores que comenzaban a quejarse del síndrome del túnel carpiano iba desde treinta y muchos años hasta cuarenta y pocos. En el 2006, encontró que la edad promedio había descendido hasta la mitad de la veintena y era incluso inferior para algunas personas. "Ahora, los niños están utilizando ordenadores a los dos años de edad, así que para cuando se incorporen a la población en edad laboral ya serán propensos a lesiones", advierte Hedge.Para determinar mejor cómo los conceptos de diseño pueden prevenir tales lesiones, el Grupo de Investigación de Ergonomía y Factores Humanos de Hedge en la Universidad de Cornell estudia dispositivos experimentales, algunos de los cuales podrían resultar útiles. Entre sus proyectos recientes se encuentran:


- Ratón vibratorio: Hedge y Chris Moe estudiaron si un ratón vibratorio puede prevenir trastornos musculoesqueléticos en las extremidades superiores de los usuarios de ordenadores, al instar a quienes los utilicen a retirar la mano del ratón para evitar así su uso excesivo. Aunque los individuos dejan de tener cogido el ratón con más frecuencia cuando utilizan un ratón vibratorio en lugar de un ratón normal, también se comprobó que estos tendían a mantener sus manos suspendidas a poca distancia por encima del ratón. Esta posición tiende a ser más perjudicial debido al incremento potencial en la actividad muscular estática requerida para sostener la mano sin apoyarla.


La conclusión es que las personas deberían dejar descansar sus manos en una superficie plana cuando sintieran la vibración.- Sillas ondulatorias: Otro estudio examinó si una silla que realizaba continuamente movimientos ondulatorios a modo de masajes, con una cadencia ajustable, podría aliviar el dolor de la espalda en personas en las que tal dolor se incrementa cuando están sentadas. Aunque los resultados fueron variados, Hedge y Erin Lawler concluyeron que los asientos en movimiento son un concepto prometedor, sobre todo para individuos con problemas en la espalda.- Brazos móviles para monitores: Un tercer estudio analizó cómo, suspendiendo un monitor de ordenador de pantalla plana en un brazo móvil, se veían influidas la comodidad y las posturas de las personas. Hedge y Kathryn Boothroyd descubrieron que a las personas les gustaba de forma unánime el brazo del monitor debido a que podían ajustar sus pantallas LCD, y les daba más espacio en sus escritorios para colocar documentos.


Los investigadores observaron también que había menos quejas sobre problemas en el cuello, así como sobre el tamaño de las mesas de trabajo, debido a que las personas tenían más espacio.
Información adicional en:
Cornell U.

11 de enero de 2008

Delgadillo Songs

De Fernando Delgadillo, una Cancion Hermosa que suele Marcar mucho sentimiento de este Gran Cantautor. bueno Aqui lo dejo. Por Cierto esta Cancion le Da el etreno en un concierto en la Torre Latinoamericana de Los Angeles, en California disfrutenlo vale la pena....

Luna En Lunes
Fernando Delgadillo

Pensarás en mí como hago yo
en tu incrédula mirada de contemplación
que comienza a alzar un mundo
que extiende las alas volando en tu voz.

Y hoy que veo encender la luna
su más brillante semblante te quiero confiar
que esta noche vengo a darte
mi canción de amor que insistió en empezar.

Muy temprano he sentido tu mano
y la risa nos vuelve a pasar
de encontrarnos festejando
la aventura que nos ciñe la curiosidad.

Y aunque no confías en mí
necesitas saber que se puede intentar
y te da por desvestirte para no andar
otra vez porque vuelvo a escapar.

El recuerdo de tu beso imperdonable
vuelve a atarme a tu que
hacer de sujetarme a tu bocacon el gusto tibio y dulce de tu sed.

Hace poco que te observo
y te noté el amor solo oyéndote hablar
y que navega en tus ojos un aviso personal
y me llena la noche y me atrapas
como haría una ventana de luz
que ha bañado esta luna tempranase aclaran las noches y apareces tú.

Pensarás en mí como yo hago esta noche
que la luna cuelga en un cristal
y en mi mente se remonta tu ventana
y se resiste para regresar.

Pensarás tú en mí así
como de inevitablemente estoy pensando en ti,
y en la sola coincidencia
que esta luna en lunes te remita a mí.

Hace mucho que me encuentro
hallando en todo una señal
que termina conduciendo a donde estás
y que pueblas mi mente de vueltas
como haría una mañana de luzcuando llenas de sol las semanas
y a entregas tempranas me amaneces tú.